En un acto de colaboración y compromiso social, soldados del Batallón de Ingenieros de Desminado Humanitario N. °7 y la Unidad de Restitución de Tierras (URT) se han unido para cumplir un sueño muy esperado por una familia en la vereda Miraflores, San Carlos, Antioquia. La familia Gallo, quienes viven en condiciones de vulnerabilidad, pronto podrán mudarse a su nuevo hogar, gracias al esfuerzo conjunto de estas dos instituciones.



Un trabajo en equipo para mejorar vidas
El proyecto que lleva meses en marcha ha sido posible gracias a la donación de materiales de construcción por parte de la URT, que ha proporcionado bloques, cemento, láminas y madera para levantar la casa. El Batallón de Ingenieros, a través de su equipo de desminadores, ha aportado la mano de obra necesaria para transformar estos materiales en una vivienda digna.
El cabo primero Adrián Chungana Zúñiga, líder del proyecto de desminado y construcción, expresó el compromiso de su equipo con la comunidad: «Estamos muy contentos de poder contribuir a la construcción de esta casa. No solo trabajamos en desminado, sino que también apoyamos a las comunidades como la de Miraflores, ayudando a mejorar su calidad de vida».
La importancia de la colaboración institucional
Este tipo de iniciativas resalta la importancia de la colaboración interinstitucional para solucionar problemas sociales y mejorar la calidad de vida de las familias más necesitadas. Javier Gallo, beneficiario de la vivienda, compartió su emoción y agradecimiento: «No puedo creer que pronto tendré una casa propia. Gracias a la ayuda del Ejército y la URT, he avanzado mucho más rápido de lo que hubiera logrado por mi cuenta».
A medida que el proyecto avanza, los soldados del Batallón de Ingenieros continúan trabajando con dedicación y extendiendo su horario para asegurar que la vivienda esté lista lo más pronto posible. El sueño de la familia Gallo está cada vez más cerca de convertirse en realidad, y la comunidad de Miraflores observa con esperanza el progreso de la obra.
Próximos pasos en el proyecto
El trabajo de construcción continuará durante las próximas semanas, con el objetivo de entregar una vivienda completamente habitable. Esta acción demuestra una vez más que la solidaridad y el trabajo en equipo pueden transformar vidas, y que las instituciones del Estado tienen un papel fundamental en mejorar la vida de las personas más vulnerables.
Con este esfuerzo, la familia Gallo no solo recibirá una casa, sino también una nueva oportunidad para vivir con dignidad, seguridad y comodidad, gracias al apoyo de las entidades que han decidido unirse para hacer de este sueño una realidad tangible.
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