Según un estudio anual de la firma de análisis de datos de movilidad, Global Traffic Scorecard de INRIX 2022, se identificaron las ciudades más congestionadas del mundo y Bogotá se encuentra en el sexto lugar, donde los conductores pierden anualmente un total de 122 horas por culpa en el estancamiento vehícular, lo que es un equivalente a 5 días; esta cifra sólo significa un empeoramiento del 30% en las horas perdidas desde la última medición en el año 2021. Por lo anterior, cada vez es más importante conocer cómo la tecnología aporta a la disminución de los tiempos de transporte y es que en algunos países del mundo este estancamiento ha hecho que se implementen medidas como la tasa de congestión, que a pesar de que en Colombia no se aplica, si ha sido una posibilidad para los dirigentes, gracias a las quejas de movilidad en las principales ciudades.
¿Cómo puede ayudar la tasa de congestión a reducir los tiempos de movilidad?
La tasa por congestión es el valor que deben pagar los vehículos particulares en algunos países al crear la demanda de tráfico en un área de alto tránsito, actualmente se encuentra implementada en ciudades como Cali, pero se está analizando su uso en Bogotá. De acuerdo con la investigación de Hikvision España, la tasa de congestión puede reducir los volúmenes de tráfico en las ciudades hasta en un 30% y puede ser una herramienta poderosa en la lucha contra el estancamiento vehícular y las emisiones resultantes de los vehículos, pero la “injusticia” percibida en la forma en que se aplican los cargos puede hacer que este tipo de esquemas no sean totalmente aceptados por los conductores.
Para aumentar la aceptación de la tasa de congestión, las autoridades deben comunicar eficazmente los beneficios generales a los usuarios de la carretera, especialmente en términos de tiempos de viaje más cortos y mejora de la calidad del aire. Además, se necesitan sistemas de pago convenientes, justos y flexibles para garantizar que los usuarios de la carretera acepten los esquemas de manera rápida y completa.
Tarifas justas gracias a la inteligencia artificial
Las soluciones de IA y video inteligente pueden generar enfoques de cobro de congestión mucho más equitativos, lo que lleva a una aceptación más rápida y mejores resultados de gestión del tráfico, dice Juan Sádaba, Gerente de Desarrollo de Negocios de ITS en Hikvision España, para esto se requiere de una amplia gama de tecnologías para admitir la tarificación por congestión, desde cámaras inteligentes impulsadas por IA hasta etiquetas de identificación por radiofrecuencia (RFID), GPS y redes de comunicaciones inalámbricas; el vídeo inteligente es fundamental para garantizar que los sistemas de tarificación por congestión sean lo más eficaces y equitativos posible sobre la base de una serie de capacidades clave.
- Reconocer el tipo de vehículo sus emisiones
Las soluciones de video inteligente pueden diferenciar entre varios tipos de vehículos y aplicar cargos por congestión en función de su clasificación de emisiones. Esto a menudo se puede lograr con algoritmos que reconocen el tamaño, la forma y el modelo del vehículo, lo que permite aplicar cargos en consecuencia. Cuando esta característica no está disponible, el tipo de vehículo y la banda de emisiones se pueden determinar utilizando la tecnología ANPR (reconocimiento de matrículas), que permite que las autoridades locales y sus bases de datos crucen los detalles de registro del vehículo.
- Apoyar una tasa de congestión más justa y basada en la distancia
La tasa de congestión a menudo se considera injusta cuando se cobra una sola tasa a cualquier vehículo que ingrese a la zona. Esto significa que el costo es el mismo, ya sea que un vehículo cruce el área controlada solo una vez o circule durante todo el día. Para abordar esto, algunas autoridades están experimentando con esquemas innovadores, como la tasa de congestión basada en la distancia. Al reconocer los vehículos y sus matrículas, el video inteligente puede admitir este tipo de modelo, que tiene el potencial de aumentar la aceptación de los esquemas de cobro por estancamiento en el futuro.
- Detectar la carga en función de las condiciones del tráfico en tiempo real
Con los esquemas tradicionales, los conductores a menudo pagan el precio completo para ingresar a las zonas de cobro por congestión, incluso cuando el tráfico es ligero. Con la capacidad de proporcionar «conciencia» del tráfico en tiempo real, el video inteligente puede admitir otros modelos donde los conductores pagan más durante las horas pico o cuando la congestión es más pesada. Esto garantiza que los conductores paguen menos cuando las carreteras están despejadas, lo que les brinda un mejor valor y una mejor experiencia de viaje en general.
- Detectar ‘excepciones’ y permitirles el libre acceso a las áreas controladas
En los sistemas de tasas justas de congestión, determinados vehículos y conductores deben poder entrar y salir de zonas controladas sin que se cobren tasas. Esto se aplica, por ejemplo, a los conductores que viven en zonas de cobro por congestión y algunos vehículos comerciales, incluidos los taxis u otros vehículos de transporte terrestre o de reparto. Con el video inteligente, estas «excepciones» pueden ser reconocidas y permitidas para entrar y salir de áreas controladas sin ser cargadas.
Cuando se trata de crear e implementar esquemas de cobro por congestión más efectivos y equitativos, las soluciones ITS de Hikvision pueden ayudar. Específicamente, nuestras soluciones pueden ser utilizadas por las autoridades para proporcionar el conocimiento del tráfico en tiempo real que necesitan para respaldar la tarificación dinámica y otros modelos innovadores de cobro por congestión. Además, nuestras cámaras impulsadas por IA pueden identificar vehículos, sus clasificaciones de emisiones y su elegibilidad para pagar cargos, en tiempo real para respaldar esquemas más justos y acelerar la aceptación.
Para obtener más información, visite el sitio web. También puede ponerse en contacto con nosotros para obtener más información sobre cómo nuestras soluciones pueden ayudar a las autoridades a apoyar una tasa de congestión más justa y eficaz.
