Tras la culminación de las obras de instalación de un moderno sistema contra incendios para dejar a salvo el patrimonio documental de la ciudad a las futuras generaciones, este jueves el Archivo de Bogotá reabrió sus puertas al público.
Y no era para menos, pues la historia documental de Bogotá ha sido poco afortunada con los incendios del Palacio Virreinal en 1786 y el ocurrido en las Galerías Arrubla en 1900, cuando se convirtió en cenizas toda la documentación colonial que estaban en la capital del país, incluidos los originales de las Actas de la Fundación de Bogotá y el Acta de Independencia nacional firmada el 20 de julio de 1810.
Para que situaciones como estas no se vuelvan a presentar, el Distrito decidió realizar la Fase II de la Red Contraincendios en el Archivo de Bogotá, una inversión de más de $3.300 millones en su sede actual, inaugurada el 6 de agosto de 2003, hace 21 años,
El acto de reapertura estuvo a cargo del secretario General de la Alcaldía Mayor, Miguel Silva, y el director del Archivo de Bogotá, el profesor Ricardo Rivadeneira, quienes dieron fin a las obras que implicaron intervenciones en oficinas, talleres, laboratorios, salas de consulta y exposiciones, así como áreas comunes, asegurando la protección del invaluable patrimonio documental que allí se resguarda.
Así mismo, se ejecutaron adecuaciones en la Sala de Exposiciones, mejorando las condiciones de iluminación y acabados.
“Después de varios meses de trabajo, logramos reabrir nuestro Archivo de Bogotá que juega un papel fundamental como invaluable repositorio que no solo conserva documentos esenciales que narran la evolución de la ciudad, sino que también sirve como guardián de nuestra memoria colectiva y de la administración distrital”, dijo Silva.
Y agregó: “Hacer esta inversión es también reconocer la labor del Archivo de Bogotá, pues es aquí donde tenemos la oportunidad para mirar hacia el futuro con la convicción de que, conscientes de nuestro pasado, podemos construir una mejor identidad y sentido de pertenencia por nuestra ciudad, Bogotá, la casa de todos”.
Por su parte, el director del Archivo, Ricardo Rivadeneira, aseguró: “Es un placer entregar las renovaciones del Archivo de Bogotá en un momento tan especial como las festividades de fin de año. Este espacio no solo resguarda nuestra memoria histórica, sino que ahora está listo para ser disfrutado por las familias en la temporada de vacaciones”.
Nuevas exposiciones
La reapertura también trajo consigo dos exposiciones que abordan temas clave para la ciudad: el agua como recurso vital para Bogotá y la exposición “Música a contracorriente”.
La primera es una acción que se suma a las iniciativas de la Alcaldía Mayor de Bogotá en torno al cuidado y racionalización de este recurso; explora la relación de la ciudad con el agua a través de documentos históricos de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá y el Concejo de Bogotá. Además, incluye material visual de Armando Matiz y Jorge Silva.
La segunda, “Música a contracorriente”, es el resultado de una apuesta colaborativa entre el Archivo General de la Nación y el Archivo de Bogotá, en la que se relata el ejercicio de apropiación de la música del Caribe y el Pacífico colombianos como parte de la identidad bogotana.
Ambas exposiciones estarán abiertas al público de manera gratuita de lunes a viernes, de 7:00 a.m. a 4:00 p.m.