Si bien es cierto que las ciudades inteligentes suponen un gran avance para los países en temas de desarrollo, salud y bienestar para la población, uno de los mayores retos que hay al implementarlas es mantener a salvo la información que se maneja.
Esto, especialmente, porque al tener diferentes dispositivos interconectados el riesgo de recibir ciberataques aumenta significativamente. De hecho, solo en Colombia, durante el primer semestre del año, se presentaron 29.778 denuncias por robo de información, según datos de la Cámara de Informática y Telecomunicaciones.
Y es que un ataque hacia la infraestructura de IoT, no solo causa daños o fugas a nivel de los datos y los procesos, sino que también puede impactar de manera negativa las instalaciones e incluso a los ciudadanos.
Un ejemplo de ello, es el espionaje a monitores de vigilancia o la interrupción de los servicios para los equipos de seguridad o rescate. De allí que sea necesario que durante la implementación de IoT se tenga en consideración la protección del aprovisionamiento de los dispositivos, de la conectividad entre los dispositivos y la nube, y la protección de los datos en la nube durante su procesamiento y almacenamiento.
Una forma rentable y simple de lograr tener una red segura para sus soluciones IoT es mediante la tecnología móvil celular. Específicamente, mediante la creación de una operación móvil virtual (OMV) y el uso de tarjetas SIM conectadas a esta. Así, se garantiza una comunicación segura y más rápida de los dispositivos hacia los servidores o equipos interconectados.
Según José Abraham Méndez, country manager de Plintron Colombia “Hay muchas buenas razones para elegir la comunicación celular sobre otros tipos de protocolos de comunicación de IoT, siendo la seguridad una de las mejores. Lo anterior es porque permite mantener la conexión del dispositivo Edge IoT lo más económica y simple, mientras implementa la mayoría de las medidas de seguridad dentro de la tarjeta SIM y una plataforma core segura”.
Con esto, las compañías o entidades gubernamentales pueden acceder a una plataforma de administración de conectividad que permite administrar de manera segura las conexiones de sus dispositivos móviles dentro y fuera del sistema IoT y monitorear el consumo de los datos. Además de simplificar el acceso seguro a la red, también facilita la visualización, monitoreo y administración de las conexiones a través de una interfaz de usuario.