En un mundo que se mueve a pasos agigantados, la igualdad de género y la equidad de oportunidades emergen como cuestiones vitales que sobrepasan las fronteras y definen la esencia de la sociedad. En este contexto y en el marco del Día Internacional de la Igualdad Salarial, existe una realidad acerca del estado actual de la equidad de género en Colombia y los desafíos que el país enfrenta como sociedad.
Según la Dra. Karol Marcela Vásquez Rodríguez, decana de la Facultad de Terapias Psicosociales de la Universidad Antonio Nariño (UAN), la equidad de género va más allá de la igualdad salarial, “es un concepto que abarca todas las dimensiones de la vida de las personas, desde lo biológico hasta lo cultural, político y económico. Es un llamado a reconocer que existe una interacción de una sociedad diversa, donde hombres, mujeres y miembros de la comunidad LGBTQ+ desempeñan roles variados en diferentes sectores”.
Brecha de género en cifras
En 2022, según cifras del DANE, las mujeres en Colombia representaron el 51.2% de la población, superando a los hombres. Sin embargo, la pandemia agravó la brecha de género en el mercado laboral, con 7.9 millones de mujeres empleadas en 2021 y aproximadamente 1.7 millones desempleadas, ganando un 6.3% menos que los hombres en promedio.
La tasa de desempleo femenino alcanzó el 17.5%, 6.2 puntos porcentuales por encima de los hombres, que fue del 11.3%. Además, las mujeres, especialmente las madres solteras, se han vuelto más activas en la búsqueda de oportunidades en el extranjero, representando el 52.8% de los colombianos en el extranjero en 2020. A pesar de estos cambios, persiste una brecha salarial de género, con las mujeres ganando solo el 83.5% de lo que ganan los hombres en promedio.
Educación como base del cambio
Para cerrar estas brechas económicas, laborales y formativas, la educación desempeña un papel fundamental para alcanzar el cambio social y cultural. Esta inversión no solo forma estudiantes, sino seres humanos conscientes de la importancia de la empatía, la paz y la igualdad, independientemente de su género.
«La educación debe ser vista como la base del cambio social y la transformación cultural de la sociedad. Invertir en educación implica contribuir al cierre de brechas y empoderar a las niñas para que se conviertan en mujeres líderes del mañana, capaces de identificar y desarrollar sus potencialidades en beneficio de sí mismas, sus familias y la sociedad en general», agregó la Dra. Vásquez Rodríguez.
Compromiso nacional
En el camino hacia la equidad de género, Colombia ha avanzado significativamente, respaldado por políticas nacionales y compromisos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Sin embargo, aún quedan desafíos por superar, ya que la equidad de género va más allá de la igualdad formal, reconociendo la singularidad de cada individuo y sus necesidades específicas.
Según la decana, «la Universidad Antonio Nariño, en línea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5, promueve un enfoque integral de equidad de género. Esto implica reconocer la importancia de los feminismos y su lucha por los derechos de las mujeres, pero también la necesidad de abordar los procesos con niños, hombres y la cultura patriarcal».
La equidad de género es un desafío continuo que involucra a toda la sociedad. Con educación y un enfoque integral, es posible avanzar hacia un futuro más equitativo y seguro para la sociedad en Colombia y en todo el mundo.