Buscando prevenir las enfermedades respiratorias en medio de la crisis por el COVID-19 y contribuir a mejorar la calidad del aire, el 31 de marzo se habían suspendido las labores en el sector de la arcilla, en coquizadoras de carbón, en lavanderías y tintorerías. Para ello, se había emitido la Resolución 205 (modificada por la 208) que fijó un plazo de 15 días, el cual fue prorrogado por ocho días más por la Resolución 230 del 23 de abril de 2020.
Luego de varias mesas de trabajo, en las que el equipo técnico de Corponor revisó las propuestas de las industrias generadoras de emisiones atmosféricas, para el reinicio de actividades bajo criterios de sostenibilidad ambiental, se determinó dar luz verde a esta petición, pero de manera escalonada y bajo estricto seguimiento por parte de la autoridad ambiental.
Para tomar esta decisión y permitir la reactivación gradual la Corporación también tuvo en cuenta los últimos informes de calidad del aire en Cúcuta, que arrojaron positivos resultados. Dichas mediciones se hacen de acuerdo con la metodología del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam). Para ello se tienen tres estaciones ubicadas en los barrios El Salado, Comuneros y en el centro de la capital de Norte de Santander.
El director de Corponor, Gregorio Angarita Lamk, dio a conocer que la metodología para el reinicio de actividades fue socializada con los industriales y las propuestas de las agremiaciones del sector de las coquizadoras, era que sus empresas pudieran reiniciar al ciento por ciento en menor tiempo. Frente a la solicitud, la entidad soportó técnicamente las consideraciones que se tomaron en cuenta para la decisión final, luego de evaluar lo propuesto por el sector industrial.
Así, en la Resolución 249 del 6 de mayo de 2020, quedó consignado lo siguiente: se autoriza el encendido escalonado de acuerdo a la capacidad instalada de cada empresa y al número de hornos, en un período total de ocho semanas.
Entre 1 y 20 hornos el encendido total se hará en dos semanas. Entre 21 y 50 hornos, cuatro semanas. Entre 10 y 51, cinco semanas. Entre 101 y 150 hornos, seis semanas. Entre 151 y 250 hornos, siete semanas y aquellas que posean más de 250 hornos, la activación será gradual, hasta alcanzar su nivel superior de producción en la semana ocho.
Para las empresas cuya actividad principal es la transformación de arcilla, la entidad decidió lo siguiente: entre 1 y 6 hornos, el encendido total se hará en un tiempo no inferior a dos semanas. Entre 7 y 20 hornos, tres semanas y empresas que posean más de 20 hornos, su encendido gradual se dará en un período no inferior a tres semanas
Unido a lo anterior, la dirección de Corponor dio a conocer que no todas las empresas podrán reactivar sus operaciones, pues de acuerdo con una circular emitida el 5 de mayo de 2020, durante el seguimiento que la Corporación hizo a la medida de suspensión de actividades, se identificó a las que no están cumpliendo la normatividad ambiental. A dichas empresas se les inició un proceso sancionatorio.
Así, 33 coquizadoras de carbón reinician y seis no pueden hacerlo. En el caso de la industria transformadora de la arcilla, 30 tienen luz verde y 17 deben esperar. En cuanto a las lavanderías, 15 comienzan a operar de nuevo y tres, se mantienen sin actividad.
Corponor ha dispuesto a su equipo técnico para que evalúe el impacto ambiental con el reinicio de las actividades, teniéndose presente que la repercusión en la calidad del aire debe ser mínima.
Frente a este tema el director Angarita señaló que la comunicación con las autoridades del Estado Táchira (Venezuela) se mantiene y que las acciones coordinadas son fundamentales por cuanto el aire no tiene fronteras. Así mismo, explicó que el ministro de Ambiente, Ricardo José Lozano Picón, se comprometió en fortalecer el Sistema de Vigilancia de la Calidad del Aire.
La metodología de reinicio de actividades también contó con el acompañamiento de la Gobernación de Norte de Santander, a través de las secretarías de Ambiente y de Desarrollo.
Durante el anuncio el director Angarita le agradeció a la Policía Nacional (general Ramiro Castrillón Lara, comandante de la Región 5) por el acompañamiento durante los operativos de control y seguimiento a la medida de suspensión. Así mismo, a la Procuraduría Regional y a las autoridades del departamento que generaron sinergias en pro del mejoramiento de la calidad del aire.
De cara al futuro se está avanzando en la elaboración de un protocolo para definir los pasos a seguir ante situaciones similares de afectación de la calidad del aire. Además, se seguirá emitiendo el informe de monitoreo dos veces por semana. Las universidades serán fundamentales para la generación de conocimiento científico.
Discussion about this post