Se suele pensar que la incontinencia urinaria solo afecta a las personas durante la tercera edad o que es una consecuencia de procesos asociados al parto o la menopausia. Sin embargo, cerca de 400 millones de personas se ven afectadas por esta condición[1], si la incontinencia fuera un país, sería el tercero con más habitantes en el mundo.
En ese contexto y con el objetivo de generar mayor concientización y sensibilizar sobre la importancia de aprender más de sus síntomas, organizaciones científicas como la Sociedad Europea de Urología, la Asociación Internacional de Continencia y sectores de la industria, impulsan la Semana Mundial de la Incontinencia, iniciativa que se celebra entre el 21 al 27 de junio y busca visibilizar esta condición, invitando a pacientes y cuidadores a buscar ayuda de manera oportuna para acceder a tratamientos e impulsar el bienestar y calidad de vida.
Según cifras del Reporte de Higiene y Salud desarrollado por Grupo Familia, una compañía Essity a nivel mundial el cual busca generar un dialogo abierto, informado y respetuoso alrededor de la salud y la higiene, la vergüenza es la razón más común entre las personas para no buscar ayuda y apoyo para tratar la incontinencia. A su vez, deja en evidencia que una de cada tres mujeres de más de 35 años y uno de cada cuatro hombres de más de 40 en todo el mundo, sufren de pérdidas de orina.
En este sentido, la compañía, en conjunto con su marca TENA®, ha contribuido a crear conciencia sobre este tema, brindando ayuda e información, promoviendo la aceptación de esta condición e inspirando a las personas a capacitarse mediante herramientas gratuitas como webinars en los que abordan esta condición desde la aceptación y la eliminación de tabús asociados a esta condición.
El estudio a nivel mundial evidencia también que la incontinencia sigue siendo un tema tabú muy fuerte tanto para hombres como para mujeres, pero en general, las personas están más abiertas a contarles a otros sobre esta condición respecto al reporte de 2018. Asimismo, muestra que las mujeres tienen mayor disposición a decirles a los demás que sufren de pérdidas de orina con respecto a los hombres.
“Alzar la voz sobre los tabúes que existen en nuestra sociedad con respecto a la incontinencia y entregar soluciones que ayuden al bienestar de las personas es uno de los principales objetivos como marca. Buscamos visibilizar la aceptación de esta condición y concientizar sobre la importancia de no vivir esto de manera aislada pues de esta forma se pueden presentar síntomas como el aislamiento, la depresión entre otros. Por eso entregamos soluciones e información que facilitan la aceptación de esta condición y la reincorporación en actividades cotidianas”, expresó Julián Mora, director de marketing de Nosotras, Tena y Pomys para la región Andina y Caribe.
En Colombia, por ejemplo, la marca ha trabajado desde el punto de vista educativo, entregando información de interés asociada a esta condición para generar conciencia y poder acompañar a las personas en este proceso. A través de su academia TENA®, alojado en su sitio web, www.tena.com.co, en donde busca acercar esta condición a hombres, mujeres y cuidadores para romper tabús y normalizar esta condición a nivel nacional.
Por otro lado, desde la sección de asesoría en su sitio web, TENA® se ha preocupado de entregar una guía para que, en simples pasos, las personas puedan conocer su perfil y saber qué producto se adapta mejor a sus necesidades, y así poder seleccionar las soluciones que más les acomode. Además, a través del consultorio virtual de TENA®, se acompaña y resuelven dudas sobre Incontinencia, Cuidado de la piel, Cuidados generales del adulto mayor y Pacientes en cama, de la mano de especialistas en el tema, de manera gratuita y anónima.
Con todo, Grupo Familia, una compañía Essity y su marca TENA® trabajan constantemente para garantizar una respuesta a las necesidades individuales de quienes tienen esta condición, asumiendo la responsabilidad de generar discusiones e innovaciones para mejorar la calidad de vida de las personas y permitirles reincorporarse a sus actividades diarias. Así también, poniendo el foco en educar a quienes viven con incontinencia, para empoderarlos y brindarles seguridad a millones de personas vivan de manera activa e independientemente.