La Contraloría General de la Nación cumplió con satisfacción una visita de control a la Dirección Territorial de la Unidad de Restitución de Tierras (URT) en Norte de Santander. Durante la visita interactuó con funcionarios, jueces, magistrados, solicitantes, víctimas restituidas y líderes sociales, entre otros.
Como uno de los organismos encargados de acompañar y velar por el cumplimiento de la Ley 1448 de 2011, la Contraloría General de la Nación realizó una visita en días pasados a la Dirección Territorial Norte de Santander de la URT, con el fin de conocer de primera mano el estado del proceso de reclamación de tierras en este departamento.
Dentro de las actividades realizadas por el equipo interdisciplinario que arribó a Cúcuta desde el martes pasado, estuvieron jornadas de análisis sobre casos puntuales llevados en conjunto por las diferentes áreas que integran el trabajo de la Dirección Territorial.
Asimismo, los funcionarios de la Contraloría indagaron, mediante una entrevista sostenida con el director de la territorial, José René García, lo relacionado a temas como las políticas de posrestitución, colaboración interinstitucional, difusión de la ley y el seguimiento al cumplimiento de los seis fallos hasta ahora emitidos en Norte de Santander.
Otra de las razones de la visita del ente de control fue el entablar contacto con los jueces y magistrados de Cúcuta que manejan el grupo de demandas (un total de 100) presentadas hasta ahora como mecanismo para recuperar predios perdidos a causa del conflicto vivido en la región.
Una de las jornadas más productivas de la visita realizada se cumplió el sábado en las instalaciones de la Contraloría, en Cúcuta, al desarrollarse tres diferentes encuentros con la población vinculada al proceso de restitución de tierras.
El primero de estos encuentros sostuvo con personas que actualmente adelantan la solicitud de reclamación de sus tierras. Reuniendo un grupo de cerca de 10 solicitantes convocados por la URT los representantes de la Contraloría pudieron conocer la percepción que tienen los usuarios del proceso de restitución, sus avances y dificultades.
Entre las opiniones dadas por los asistentes estuvo la necesidad de agilizar los procesos, pues en algunos casos ya se ha cumplido un año y no se conoce aún la sentencia. Por otro lado fue expuesta la iniciativa según la cual el Estado debe analizar la posibilidad de una compensación por la tierra despojada, en lugar de la restitución, para algunos casos diferentes a los ya contemplados en la ley.
También fue mencionada la necesidad de mantener la credibilidad en las víctimas, pues, según ellas, el común denominador del despojo en el país realmente obedece a ocupantes que no son de buena fe.
El segundo encuentro de la jornada consistió en escuchar a algunas de las víctimas que han sido favorecidas con sentencias para la restitución de sus tierras para conocer, de este modo, el avance efectivo y los inconvenientes para el total restablecimiento de sus derechos.
En esta instancia, los participantes expresaron su agradecimiento a la labor de la Unidad de Restitución de Tierras y se mostraron confiados en el desarrollo de los proyectos productivos conformados en algunos de los predios devueltos.
“Vemos en este proceso de restitución una esperanza. Mejor dicho, si nos falla esto, no sé qué va a pasar, porque nos creeríamos burlados. Hasta ahora es un sueño hecho realidad”, declaró una de las víctimas.
En cuanto al tema de la construcción de vivienda, algunas víctimas dejaron ver la necesidad de que se acelere este componente de la ley.
La actividad culminó con una reunión a la que asistió un grupo de líderes sociales, quienes, además de mostrarse complacidos con ejercicios de control como este, manifestaron la necesidad de incentivar la difusión de la ley en el departamento y reforzar la seguridad que blinde el proceso, tanto para reclamantes de tierra como para víctimas en general.
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